Lucía y Andrea Peña

A falta de una, hoy traemos a dos alumnas de la semana. Las hermanas Peña, Lucía y Andrea, son unas veteranas en Camplus Sevilla a donde llegaron desde Tenerife en septiembre de 2021, el año de nuestra apertura.

Son mellizas y muy muy parecidas (reconocemos que todavía, a veces, nos cuesta diferenciarlas) y eso que les tenemos un cariño enorme, al igual que a Anabel y José, sus padres. Las dos son unas residentes ejemplares, responsables, educadas y siempre colaboradoras.

Lucía estudia Fisioterapia y Andrea el Doble Grado de Ingeniería Mecánica e Ingeniería en Diseño Industrial y Desarrollo del Producto.

Lucía, cuando entró en Fisioterapia, tenía bastante claro que le gustaría aplicarla al ámbito del deporte, pero ahora, le están interesando otras ramas como la fisioterapia respiratoria.

A Andrea cuando empezó le atraía la parte del diseño, pero ahora está viendo que tiene un abanico muy amplio de salidas: “Me gusta mi carrera porque mezcla la parte más técnica con la parte más creativa y artística”.

Las dos son muy aficionadas al baloncesto y jugaron federadas muchos años en Tenerife donde también eran abonadas al CB Canarias. Ahora, juegan en la liga interna de la Universidad de Sevilla: “El baloncesto ha sido una parte importante de nuestra vida. Ahora matamos el gusanillo con la liga de la US”. Cuando pueden suelen ir a los partidos del Betis Baloncesto. También les gusta viajar, ir a conciertos, ver  series juntas… Y es que se llevan de maravilla entre ellas.

A Lucía le costó un poco adaptarse a Sevilla, pero a partir de 2º curso hizo muy buen grupo tanto en la carrera como en la residencia y ahora está muy contenta. A Andrea le ocurrió algo parecido, pero luego también encontró muy buenas amistades; quizás al llegar juntas, se refugiaron la una en la otra, pero ahora están encantadas. También tienen familia en Sevilla, por lo que tienen ese apoyo. En la ciudad están muy a gusto: “Se parece bastante a Canarias en la forma de ser de la gente, que son muy cercanos”. De la resi, a Lucía le encanta el solárium para desconectar y tomar el sol y Andrea valora, sobre todo, los ratos que comparte con otros compañeros.