Nuestra estudiante de la semana, María Polina, decidió estudiar Marketing por influencia de su tía, que es Directora de Marketing y a María siempre le ha parecido muy inspiradora. Le encantaría trabajar en ese sector, sobre todo en el ámbito de la moda: “En Donosti nos gusta vestir bien. En mi familia siempre hemos cuidado ese aspecto. Cuando acabe Marketing, haré un máster relacionado con la Moda, ¡me apasiona!”
También siente adoración por el deporte, y en particular la gimnasia rítmica. Desde los once años, ha participado en un club haciendo conjuntos de gimnasia. El año pasado consiguió su mayor logro, ¡el segundo puesto en el campeonato de Guipúzcoa! Ella tenía claro que, si estudiaba en Pamplona, continuaría entrenando. Se apuntó en un club de Ansoain, ¡donde está encantada! y en junio competirá en Navarra.
La gimnasia le ha aportado amigas, satisfacciones ¡y aprendizaje! “La gimnasia me ha dado autoestima, control mental y disciplina. Cuando compites, sabes que, en los cinco minutos que dura la coreografía, te juegas el trabajo de todo el año. Aprendes a desarrollar la fuerza física y mental, y a manejar la frustración. También me ha ayudado a liberar la tensión, a gestionar mi tiempo y a tener hábitos de vida saludables. Además, he aprendido mucho sobre el trabajo en equipo. Cuando haces conjuntos, debes estar muy sincronizada con tus compañeras, porque cinco personas hacemos una. Nos exigimos mucho, y también nos cuidamos y apreciamos. Se crean vínculos muy bonitos”.
Eligió Camplus porque se la recomendaron y porque está en el centro de la ciudad: “Estoy a 10 minutos de todo. He hecho much@s amig@s y el ambiente es muy acogedor. ¡Tod@s sois muy maj@s!”
Admite que, entre la carrera y la gimnasia, no le queda mucho tiempo libre, pero siempre encuentra espacio para su gran hobby: la lectura. “Me encantan los libros de fantasía y de romance. Soy una freeky, ¡en tres días me he leído 600 páginas! Me gusta dejar volar la imaginación, es muy liberador.”
María es sensible y cariñosa, como ella misma dice ¡un osito de peluche! Se considera empática y muy familiar. Es imposible no tomarle afecto, en la resi ¡nos tiene cautivad@s!