Mar, nuestra alumna de la semana, quería estudiar una carrera que fuera práctica. En Bachiller le frustraba tener que estudiar asignaturas que no tuvieran una utilidad clara. Pensaba estudiar ADE en Barcelona, hasta que descubrió que en la Universidad de Navarra existía ISSA (Grado en Gestión aplicada). Su familia es de Gerona, pero su madre estudió en la UNAV y guardaba un recuerdo maravilloso de su etapa en Pamplona. Ella ¡terminó de animarla!
La carrera le convenció desde el principio, definitivamente ¡era lo que estaba buscando! Durante todo el curso trabajan en la elaboración de un proyecto “cuasi real” y todo lo que aprenden se aplica en el proyecto: “A mí siempre me ha encantado organizar eventos y conocer gente. En esta carrera aprendes a planificar y a integrar todo, desde bases de datos, hasta aspectos económicos y de comunicación. Me entusiasma la carrera, sobre todo este segundo curso, que es más práctico que el anterior”.
Ciertamente, la carrera le va ¡como anillo al dedo! Ya está en tercer curso y el próximo año dejará Pamplona (¡y la resi! ooooooh) para hacer el programa Erasmus. Porque Mar es decidida, emprendedora y ¡muy dinámica! Tiene muchas aficiones. Le apasiona el golf, que ha practicado desde los seis años. Formaba parte de un equipo con el que compitió por toda Cataluña. También le encanta la música, empezó a los tres años y llegó hasta el final, sacándose el título profesional de solfeo y violín. Después probó con la música electrónica dos años. No quería dedicarse profesionalmente a ello, pero reconoce que le entusiasma la música y, cuando regresa a Gerona, siempre encuentra tiempo para rescatar su violín.
Se considera muy afortunada de compartir, tanto sus aficiones como su aventura universitaria, con su hermana Eva. Y es que ellas son “dos en una”, mellizas, compañeras de curso, de cuadrilla ¡y de habitación! “Llegas a un sitio nuevo, emprendes una nueva vida, pero no estás sola. Es un gran apoyo, la primera persona a la que le cuento mis cosas”.
Su compañía le ha facilitado mucho la adaptación, hasta el punto de que se plantea ¡establecerse en Pamplona! “Me gusta mucho la ciudad, tiene ambiente, no sólo estudiantil, sino en general. Existe una cultura de salir, de querer verse. Tiene muchos espacios verdes y todos están bien cuidados. La calidad de vida es muy buena. ¡Y tiene el tamaño perfecto! Cuando acabe la carrera, yo creo que me quedaré aquí”.
Pero ella, su hermana y su madre no son las únicas fans de Pamplona en su familia: “Mi abuela se hizo Instagram sólo para seguirnos a nosotras, a la universidad y a la residencia. ¡¡No me extrañaría que también se viniera a vivir aquí!!”