Claudia Campos

Claudia, viene de Marbella y desde que tiene uso de razón siempre ha querido estudiar Arquitectura así que este pasado verano accedió a este grado en la US: “De pequeña, me gustaba jugar con los LEGO y los PLAYMOBIL, los montaba y los volvía a desmontar”.  Le encanta salir a andar con su madre y observar las casas, ver cómo están construidas… También tiene una prima arquitecta a la que le pregunta cosas sobre la profesión.  Su sueño sería tener su propio estudio. Le gustaría hacer un Máster en Domótica para hacer casas inteligentes integrando en ellas la tecnología.

Claudia se considera una persona disfrutona, nerviosa e inquieta: “Lo vivo todo mucho”. Es también muy deportista. Jugó al baloncesto en el Marbella Basket desde muy pequeña y lo dejó hace un par de años: “Para mí el deporte y formar parte de un equipo ha sido de las partes más importantes de mi vida. El baloncesto es mi pasión y mis amigas del equipo van a serlo para toda la vida. Se crea un vínculo como si fuéramos hermanas”. El momento de dejarlo fue algo duro: “Cada vez me era más difícil compaginarlo con los estudios. Mi padre y yo somos unos frikis del deporte; nos levantamos de madrugada para ver algún partido de la NBA que nos interese, me encanta Luka Doncic”. Ahora aquí en Sevilla no juega, pero le gusta salir a correr con algún compañero de la resi.

Claudia no tenía pensado venir a estudiar a Sevilla: “Soy muy cuadriculada y lo tenía todo organizado para estudiar en Málaga, pero finalmente fui admitida en Sevilla y estoy encantada; echo de menos a mi familia, eso sí y también la playa y el airecito del mar”.

“Nada más que vine a visitar Camplus y vi las actividades que se hacían y demás, decidí que vendría a Camplus y no me equivoqué, desde los primeros días formamos un grupo genial y somos como una pequeña familia”. Una escena que se está dando este año y nos encanta es verlas casi todos los días jugando a las cartas en el salón de la resi un ratito después de comer antes de ir a clases.